Un ensayo de 350 palabras sobre mis sentimientos después de aprender artes marciales.
Estoy feliz de compartir mi experiencia contigo aquí. La primera vez que entré al campamento militar, experimenté por primera vez la seriedad de la disciplina. La primera vez que sentí el sol abrasador, la primera vez que sentí la lluvia torrencial, la primera vez que viví según las normas... Muchas primicias nacieron en nuestra vida en el campamento militar.
Soy un niño que no ha sido mimado por mis padres. Al crecer, pude hacer muchas tareas domésticas y siempre me sentí muy feliz y bendecida. Pero desde que llegué al campamento militar, tenía que hacerlo todo yo solo; el instructor me castigaba si me sentaba lentamente; enjambres de mosquitos me atacaban por la noche; también tenía que hacer un entrenamiento estándar, etc. , estos son muy molestos. Descubrí que ser autosuficiente no es tan sencillo y tengo que aprender todo desde cero. Si quieres vivir una vida más cómoda, debes organizar muchas cosas adecuadamente y no dejar que tu temperamento se vuelva loco.
Siento profundamente el sabor de la biblioteca. Levantarse a las 6:30 todos los días es demasiado cruel para nosotros, los estudiantes, a los que nos encanta dormir hasta tarde. Y los 10 minutos están por terminar y hemos completado la tarea. Los ejercicios diarios por la mañana y por la noche nos cansan mucho. En definitiva, todo debe ser informado. Las palabras del instructor son órdenes ¡Solo podemos obedecer sin condiciones!
El estricto entrenamiento militar aquí me hace sentir serio y nervioso. Me trae el temperamento de un soldado: al caminar, debes mantener la cabeza en alto y el pecho en alto, no rascarte al azar, tratar de no moverte cuando estés firme y comer y descansar con regularidad.
La satisfactoria vida militar también me dio consuelo. Practicar boxeo militar, bailar, tiro al blanco, tener relaciones sexuales, cantar, etc., hace que la gente se sienta muy cómoda y feliz. Vivimos juntos, cooperamos unos con otros, nos ayudamos y nos cuidamos unos a otros, lo que me hace desarrollar la buena cualidad de la unidad. Déjame entender que un equipo es un colectivo. Si las personas del colectivo están unidas, entonces este es un buen equipo que trabaja duro. Si es un desastre, afectará al equipo. Tenemos espíritu de equipo, química y unidad.
Aquí también aprendí mucho. Me gustaría agradecer a mi padre, madre, líderes de tropa e instructores por darme esta oportunidad de hacer ejercicio. Creo firmemente que todo lo que aprendí en el campamento militar algún día será útil.
La primera vez es intentarlo. ¡Lo probé y estoy muy feliz! ¡Me enseñó que el crecimiento significa independencia, autosuficiencia y cambio!