Una carta a mi madre sobre mi experiencia de lectura.
¡Hola!
¡Mamá, gracias por tu amabilidad! Eres la brisa primaveral que toca mi corazón joven; eres una lluvia primaveral que nutre mi corazón seco, eres un rayo de sol que brilla en mi tiempo de crecimiento.
Cuando era niño, ibas a trabajar durante el día y me contabas cuentos por la noche. Me animaste a leer y me convertiste de un niño travieso al que le encantaba mirar televisión a un "amante de los libros". Ahora, además de estar ocupado con el trabajo, también tengo que revisar mi tarea y explicar problemas difíciles todas las noches. Siempre estás tan cansado que te quedas dormido en la mesa.
Recuerdo aquella vez que me llevaste al centro de rehabilitación visual para un chequeo. Había una tormenta de nieve por todo el cielo y no había coches en la carretera. Me acabas de llevar de casa al hospital... ¡Mis ojos fueron corregidos, pero te enfermaste! ¡Usted es maravilloso!
Recordaré que te pusiste mi abrigo y mi ropa en el viento frío, que me trajiste un paraguas bajo la lluvia y tú... Estudiaré mucho, entraré a una buena escuela y usaré prácticas. acciones ¡Devuélvete tu cuidado y amor!
Te deseo todo lo mejor.
¡Buena salud y todo lo mejor!
Hijo: XXX
9 de octubre de 2016