Cuatro sugerencias para cuidar a los estudiantes
La combinación de cuidado y requisitos estrictos
"Brisa primaveral y lluvia derretida" es amor, y "rigurosidad" también es amor. “Un maestro estricto produce un buen discípulo”, detrás del rigor hay moderación, formación, estímulo y cuidado.
Comprende a cada estudiante
Cuanto más profunda sea la comprensión, más profundo será el amor. Por lo general, deberías hablar más con tus hijos y conocerlos para poder entenderlos. A veces, la actitud comprensiva y la sonrisa tolerante del maestro son mucho más útiles que la crítica y la educación serias, ya que permiten a los niños reflexionar, introspeccionarse y mejorar gradualmente.
Tratar a todos los estudiantes por igual.
Solo cuando los profesores traten a todos los estudiantes de manera justa y equitativa podrán ganarse el corazón de los estudiantes, ¡y la educación será persuasiva y contagiosa!
Elogia y motiva más a los estudiantes.
Ser afirmado y elogiado es una necesidad psicológica común de los niños. Una vez satisfecho, se convertirá en una motivación positiva y producirá un efecto motivacional. Respetar la personalidad de los estudiantes, elogiar más, criticar menos y reprender menos.