La Red de Conocimientos Pedagógicos - Aprendizaje de redacción de artículos/tesis - Boceto en prosa "Festival de las Flores"

Boceto en prosa "Festival de las Flores"

La vida es como una flor, el tiempo sigue siendo el mismo, pero el corazón es viejo.

El tiempo, así, persigue tu memoria en retrospectiva y perspectiva; el tiempo vuela, así, dando vueltas y desapareciendo para siempre.

El tiempo pasa volando, pero no sé cuándo, mi corazón parece estar viejo y entumecido. Sólo tiene 17 años, pero parece aterradoramente viejo. La vida parece no tener vitalidad, sólo los latidos del corazón repitiendo la misma melodía.

El mundo se ha detenido, ¿por qué no podemos ver los magníficos colores y escuchar los coloridos sonidos? Durante el día se desarrolla un mundo colorido y una persona se acurruca sola en la noche oscura. Abre los ojos y mira un cuento de hadas donde sólo nosotros tenemos prisa. No hay rastros de nubes en el cielo que pasan; el invierno se convierte en primavera, la vida parece repetirse y ya no quiero perseguir ciegamente el cansancio.

Abre un ojo vagamente y mira el mundo bullicioso durante el día. Más tranquilo, el espejismo se llena de tu encantadora figura, el paisaje no ha cambiado, sigue siendo este lugar, pero la vida está envejeciendo.

Una persona, en el tiempo fugaz, soy libre y sin escrúpulos. Todo pasa, aunque sea una estancia corta, no seas codicioso, solo sonríe y déjate llevar por el viento. Nada se detiene cuando más lo necesitamos. El mundo es como el humo del pasado, no permanecerá para siempre para todos. La memoria es también un rasguño que pasa rodando, con un corazón que nunca estará completo. Solo quedó una pequeña imagen residual, inolvidable, sin mucha nostalgia, solo anhelo, anhelo.

Érase una vez, yo también soñaba con el mañana.

Ese día, las hojas del otoño acababan de caer al suelo.

Ese día fue el punto de inflexión en mi vida de fantasía.

Ese día, las cintas de colores se tiraban fácilmente, convirtiendo las cerezas en rojas y los plátanos en verdes.

Ese día, el sueño se enamoró del rincón de mi corazón.

Caminando por las calles familiares pero confusas, muchas expectativas y sueños están a punto de zarpar desde aquí. Sin embargo, lo que nos espera no es sólo el sol brillante, sino también el dolor del Nirvana Fénix.

Érase una vez, cuando mirábamos la brillante Vía Láctea sobre nuestras cabezas, no veíamos las lágrimas llorando por ti. Porque cuando sea mayor ya no creo en los cuentos de hadas.

Cuando era niño soñaba con crecer, pensando que cuando sea mayor podré hacer lo que quiera, sin embargo, con el paso del tiempo, poco a poco vamos creciendo. Los sueños que alguna vez tuve se han vuelto borrosos y son solo fugas y escapes. Los corazones frágiles y sensibles son arrastrados por las emociones, pero todavía estamos creciendo.

Sin embargo, seguimos siendo amables. Cuando fantaseamos con el futuro, tenemos que soportar el dolor insoportable en nuestro corazón. Soy joven e ignorante y no entiendo las reglas del mundo de los adultos.

Cuando despertamos de nuestros sueños, pretendemos ser fuertes y afrontar este mundo cruel, solos y solitarios.

Jóvenes, somos sencillos, ignorantes y amables. Aprenderemos a mantener la cabeza en alto y no dejar caer las lágrimas. Aunque estemos heridos, fingiremos ser fuertes, nos daremos la vuelta, sonreiremos y te diremos: estoy bien, muy bien.

La vida se templa constantemente y no queremos quedarnos donde estamos. Incluso si la vida ha perdido gran parte de su brillo, no queremos permanecer en ese dolor triste. Sigue tus sueños hasta el final.

No puedo olvidar ese día, yo estaba en silencio y tú eras tímido...

No puedo olvidar ese momento, cuando estábamos parados charlando, estábamos indefensos.. .

No puedo olvidar esos sentimientos fugaces. . . Luego escribe los tristes y los felices.

¡No puedo olvidar el pequeño recuerdo al que alguna vez pertenecemos!

El tiempo sigue siendo el mismo, los años fugaces siguen siendo los mismos, pero el corazón va envejeciendo. . .