Diario de bocetos de la ciudad de Fangzi
Caminamos hasta la ciudad de Fangzi, donde los edificios son realmente antiguos: bungalows, cuidadosamente dispuestos en el pueblo, con paredes de tierra amarilla, techos triangulares rojos, tragaluces y chimeneas cuadradas. ¡Hay tanta energía delante y detrás de casa! Las flores violetas florecen brillantemente, en rosa, violeta y blanco, y son muy hermosas en verano, los manzanos están llenos de frutas y pequeñas manzanas verdes cuelgan de las ramas, lo que indica la alegría de la cosecha; una gran superficie de hierba; la hiedra no se queda atrás, simplemente trepa la pared de tierra. ¡Te amo tanto!
Entré en una casa pequeña, que estaban renovando, y no había nada. De repente encontré un agujero en la esquina de la casa. Me acerqué y vi que era una escalera. Bajé las escaleras y había una habitación vacía allí abajo, pero hacía frío. Papá me dijo que esto es un sótano, cálido en invierno y fresco en verano. Allí almacenaba en aquella época los suministros el ejército alemán.
De esta pequeña sala, entramos a otra sala donde se exhibían muchas pinturas y trabajos de caligrafía. Resulta que la actual ciudad de Fangzi se ha convertido en un estudio donde trabajan y exponen calígrafos y pintores.
A la vuelta sentí que la ciudad de Fonz empezaba a avanzar hacia una nueva era.