¿A quién debería haber formado la empresa?
El primero son los empleados recién contratados. Capacitar a los empleados recién contratados puede ayudarlos a incorporarse al trabajo sin problemas.
En segundo lugar, las personas necesitan mejorar sus puestos de trabajo actuales. Estas personas suelen ser la columna vertebral de la empresa y la capacitación puede familiarizarlas más con su desempeño laboral para promover el logro de los objetivos corporativos.
En tercer lugar, se necesitan personas que necesiten dominar otras habilidades. Hay dos tipos de personas así. Un tipo es la columna vertebral de la empresa. La empresa los necesita para actualizar sus conocimientos y convertirse en talentos compuestos. El otro es para personas que necesitan ser transferidas a nuevos trabajos y necesitan recibir capacitación para estar calificadas para el nuevo trabajo.
Por último, están aquellos con potencial. El propósito de este tipo de capacitación es estimular y explorar sus capacidades potenciales y hacer mayores contribuciones a la empresa.