Todos recogen leña y las llamas se elevan. altos proverbios ingleses
Primero, modismos y alusiones
Había una vez, el rey Tuyuhun tenía 20 hijos. Sus 20 hijos son todos muy capaces y difíciles de distinguir. Sin embargo, son autosuficientes, altamente capacitados y no se preocupan por los demás. Piensan que sólo ellos son los más talentosos. Los 20 hijos a menudo pelean en secreto, se burlan entre sí cuando se encuentran y siempre hablan mal el uno del otro a sus espaldas.
Acán se preocupó mucho al ver que sus hijos eran incompatibles entre sí. Entiende que el enemigo puede fácilmente aprovechar esta situación incompatible y derrotarlos uno por uno, y entonces la seguridad nacional estará en juego. Acán suele aprovechar diversas oportunidades y ocasiones para enseñar a sus hijos a no atacarse ni pelear entre sí, sino a unirse y ser amigables. Sin embargo, lo que los hijos le decían a su padre entraba por un oído y salía por el otro. En la superficie fingen seguir las instrucciones, pero en realidad no se lo toman en serio o siguen su propio camino.
A medida que Chacal crecía, supo que su reinado no duraría mucho. Pero, ¿qué harán los hijos después de morir? Nadie puede enseñarles ni mediar en sus conflictos. ¿No va a quedar destrozado ese país? ¿Cómo podemos hacerles entender la unidad? El chacal estaba cada vez más preocupado.
Un día, Aman, que llevaba mucho tiempo postrado en cama, previó la muerte y finalmente tuvo una idea. Llamó a sus hijos a la cama del hospital y les dijo: "Cada uno de ustedes puso una flecha en el suelo. Los hijos estuvieron de acuerdo de alguna manera". El chacal llamó a su hermano Mu Liyang: "Coge una flecha y rómpela". Mu Liyan tomó una flecha junto a él y la rompió con un poco de fuerza.
El chacal agregó: "Ahora recoges las 19 flechas restantes, las atas y tratas de romperlas". Mu Liyan agarró el manojo de flechas y chupó la leche con todas sus fuerzas. Apretó los dientes y se inclinó, las venas de su cuello quedaron expuestas y sudaba profusamente, pero nunca rompió el manojo de flechas.
El chacal se volvió lentamente hacia sus hijos y les dijo con seriedad: "Todos sabéis que una flecha se rompe cuando la doblas ligeramente, pero se sigue rompiendo cuando la juntas. Tus hermanos, lo mismo ocurre. Si Si luchan entre sí y actúan solos, fracasarán fácilmente. Sólo cuando 20 personas se unan y trabajen juntas podrán tener un gran poder y poder derrotarlo todo y mantener la seguridad nacional”.