¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad de Buerger?
Enfermedad de Buerger (tromboangeitis obliterante): Esta enfermedad puede bloquear gradualmente las arterias de las extremidades, especialmente las de las inferiores, y también se denomina necrosis idiopática. Las lesiones son inflamatorias y afectan principalmente arterias y venas con una gravedad moderada a moderada. Las arterias se obstruyen a causa del trombo, y quedan parcialmente adheridas y envueltas por tejido ligante, formando haces y endureciéndose. Esta es su característica.
Esta enfermedad es común en hombres más jóvenes de entre 20 y 40 años. La obstrucción causada por la arteriosclerosis se observa a menudo en el diagnóstico y tratamiento diario en personas mayores de 50 años. La causa no está del todo clara, pero es más común en hombres y algunas personas piensan que está relacionada con trastornos endocrinos. Además, debido a que los fumadores son más susceptibles a la enfermedad, puede estar relacionada con el tabaquismo.
Síntomas: Debido a la obstrucción arterial, la sangre no puede fluir completamente hacia la periferia, lo que puede provocar isquemia y diversos síntomas. Al principio, habrá entumecimiento, frialdad, decoloración, etc. en las manos y los pies. A medida que avanza la enfermedad, aparecerá gradualmente dolor y los dedos de las manos y los pies se volverán pálidos y cianóticos. Además, el pulso de las arterias del tobillo está ausente o es muy débil.
Los pies afectados se cansan con facilidad y pueden cojear debido al dolor al caminar. La parte frontal de los dedos de los pies es propensa a sufrir úlceras que son difíciles de curar.
Las lesiones en los dedos de los pies suelen tratarse como paroniquia. La enfermedad se caracteriza por un dolor mayor que la extensión del daño. Además, no sólo las arterias de las extremidades inferiores, sino también las arterias de las extremidades superiores suelen desarrollar lesiones al mismo tiempo. Sin embargo, los síntomas en las extremidades superiores son más leves que los de las inferiores.
Diagnóstico y tratamiento: El diagnóstico se puede realizar fácilmente revisando las arterias de las extremidades en busca de pulsaciones.
Para obtener una imagen detallada de la enfermedad, se puede realizar una arteriografía o controlar la temperatura de la piel y el pulso en los dedos de manos y pies.
En primer lugar, debes dejar de fumar por completo. Además, para prevenir el frío y los traumatismos, hay que prestar atención al vestirse.
Los vasodilatadores e inhibidores de la función plaquetaria están disponibles para el tratamiento médico y son muy eficaces en el tratamiento de esta enfermedad. Además, los tratamientos quirúrgicos se han vuelto más comunes recientemente, pero en general, esta enfermedad rara vez es objeto de cirugía vascular y, principalmente, se realiza simpatectomía.