Al lado de la biblioteca
En lugares públicos como las bibliotecas, debemos guardar silencio y estudiar solos. No es apropiado que estos estudiantes sólo piensen en sí mismos y no se preocupen por los sentimientos de los demás.
1 Puedes elegir otra sede para estudiar.
Puedes decírselo de forma amigable para mantener la voz baja.
Tapa tus oídos con algodón o mejora tu calidad psicológica frente a interferencias
Avisa al bibliotecario y pídele que te ayude a coordinar para evitar problemas innecesarios por hablar directamente. Después de todo, todo el mundo está aprendiendo, sólo que de diferentes maneras. No hay necesidad de guardar rencor ni sentirse triste.