Un argumento para el optimismo ante el éxito
El optimismo es pan comido en la pobreza, las cálidas palabras de los amigos en las dificultades y un faro brillante en la confusión... Te lleva a seguir trabajando duro y progresando en el proceso del éxito. Sin él, la vida sería sombría.
Al observar la situación cambiante, la mayoría de las personas exitosas son optimistas. Gou Jian, el rey de Yue, es uno de ellos. Cuando Wu y Yue estaban peleando, el rey de Yue fue capturado y el rey de Wu lo usó como peón. Es una gran vergüenza para un emperador. El ejército fue derrotado y él fue capturado. Pero ante esta serie de golpes, Gou Jian no se inmutó ni se lamentó ciegamente como Li Yu. Ante la humillación, afrontó su destino con optimismo y se preparó para la guerra durante diez años. Al final, el Rey de Yue se levantó y derrotó al Rey de Wu de un solo golpe, aclarando su vergüenza. Ante la humillación, fue el optimismo lo que revivió al Rey de Yue, y fue el optimismo lo que lo impulsó a seguir mejorando. Si el rey de Yue no hubiera visto con optimismo la desaparición del país, tal vez la historia de China se habría reescrito.
También pensé conscientemente en el gran músico Beethoven. No se sintió triste ni acobardado, sino que afrontó la injusticia del destino con una actitud optimista. Consideraba el mundo pacífico como un paraíso para templar su temperamento y buscar inspiración. Con su perseverancia, finalmente creó una obra maestra impactante: la Sinfonía del Destino. La vida es así. Sólo confiando en tu propia perseverancia podrás realizar tus hermosos sueños. El optimismo es como un catalizador mágico que convierte las lágrimas en sudor y el fracaso en motivación ascendente, acompañándonos a seguir adelante con valentía.
Sin embargo, el optimismo no es indiferencia, ni tampoco felicidad. Hay que tratarlo con una actitud correcta. El fracaso no podemos considerarlo algo normal por un tiempo, pero debemos aprender de él, levantarnos de nuevo y lograr el siguiente objetivo.
El optimismo es indispensable para el éxito, al igual que la libertad lo es para los pájaros y el sol para las flores y las plantas. Es el catalizador de nuestro éxito, que nos impulsa a seguir avanzando y hacerlo con valentía. Salgamos a la carretera con actitud optimista, tal vez el éxito no esté lejos de nosotros.