¿Qué es el pensamiento jurídico? ¿Cuáles son las formas de cultivar el pensamiento jurídico?
1. Aprender conocimientos jurídicos
Aprender y dominar los conocimientos jurídicos básicos es el requisito previo para cultivar el pensamiento jurídico. El conocimiento jurídico generalmente incluye el conocimiento de las leyes y reglamentos y el conocimiento de los principios legales. Estas dos partes del conocimiento jurídico son muy importantes para cultivar el pensamiento jurídico. Sólo comprendiendo las leyes y reglamentos y sus principios y principios podremos comprender mejor el espíritu de la ley y cultivar el pensamiento jurídico.
2. Dominar los métodos jurídicos
El proceso de pensamiento jurídico es el proceso de utilizar métodos jurídicos para pensar, analizar y resolver problemas jurídicos. Los métodos legales incluyen principalmente dos aspectos: uno es el método para comprender correctamente la ley y el otro es el método para aplicar correctamente la ley, incluido el uso de normas, análisis comparativo, razonamiento lógico y otros métodos para resolver problemas de casos específicos.
3. Participar en la práctica jurídica
El pensamiento jurídico es una forma de pensar que se entrena, cultiva y aplica en una rica práctica jurídica. Sólo participando en diversas actividades jurídicas se pueden formar hábitos de pensamiento conscientes del Estado de derecho. Las formas en que las personas pueden participar en la práctica jurídica incluyen participar en debates legislativos, comprender y recibir comentarios sobre las necesidades sociales y presentar sugerencias razonables.
Ejercer facultades de supervisión de conformidad con la ley, supervisar el ejercicio del poder público, exponer y corregir actividades ilegales; observar los juicios judiciales, comprender y evaluar los procedimientos y resultados judiciales y mejorar la credibilidad judicial; , clínicas jurídicas, debates jurídicos, etc. Actividades para ejercitar tu capacidad dialéctica y persuasiva.
4. Desarrollar el hábito de respetar la ley
El pensamiento jurídico es un tipo de pensamiento habitual, que tiene mucho que ver con hábitos conscientes a largo plazo. Sólo respetando conscientemente la Constitución y las leyes e insistiendo en partir de nosotros mismos, de nuestro entorno y de cuestiones específicas podremos desarrollar el hábito de obedecer las leyes y reglamentos y pensar en el Estado de derecho.
5. Mantener el resultado final de la ley.
Las líneas rojas legales no se pueden cruzar, y los límites legales no se pueden tocar. Nadie puede ejercer un poder por encima de la ley, utilizar palabras para representar la ley y hacer cumplir la ley de forma selectiva. Especialmente cuando se trata de sus propios intereses, debe ser autodisciplinado, autorreflexivo, respetar las reglas y no involucrarse en privilegios o subtextos. Debemos promover vigorosamente los asuntos gubernamentales abiertos, aceptar conscientemente la supervisión social y pública, protegernos de manera abierta y transparente y mantener la dignidad jurídica.