El desarrollo de los judíos chinos
Después de la Revolución Rusa de 1917, miles de judíos rusos (muchos de los cuales eran antijaponeses) emigraron a Harbin, en el noreste de China, junto con cristianos ortodoxos. Entre ellos se incluyen el abuelo y los padres del Primer Ministro israelí, así como la familia del Primer Ministro ruso.
Segunda Guerra Mundial: otra oleada de entre 65.438 y 8.000 inmigrantes judíos entró en Shanghai desde Alemania, Austria y Polonia en las décadas de 1960 y 1930. Shanghai en aquella época era una ciudad abierta y muy tolerante con los inmigrantes de todo tipo. En 1943, las fuerzas de ocupación japonesas solicitaron que estos 18.000 judíos, oficialmente conocidos como refugiados apátridas, fueran reasentados en un área de 3/4 de milla cuadrada en el distrito Hongkou de Shanghai. El número total de judíos que entraron en Shanghai durante este período fue igual al número total de judíos que fueron a Australia, Canadá, India, Nueva Zelanda y Sudáfrica. Muchos judíos en China fundaron más tarde un estado moderno de Israel.
Durante el Holocausto, Shanghai se convirtió en un importante refugio para los refugiados judíos porque era uno de los pocos lugares en el mundo que no requería visa.
Durante la Guerra Antijaponesa de China, los judíos brindaron mucha ayuda al pueblo chino, como el Dr. Jacob Rosenthal como médico de campo para ayudar * * * a producir el ejército del partido, y Maurice Cohen se convirtió en Los guardaespaldas de Sun Yat-sen y muchos destacados empresarios judíos que vivían en Hong Kong hicieron donaciones caritativas a los refugiados chinos durante la guerra.
Al final de la guerra, los representantes nazis presionaron al ejército japonés y formularon un plan para eliminar a los judíos en Shanghai, y este plan fue aprendido por los líderes de la comunidad judía. La guerra terminó antes de que los japoneses pudieran ponerla en práctica.
La segunda mitad del siglo XX: Después de la Segunda Guerra Mundial, China estableció el Gobierno Popular en 65438-0949. La mayoría de los judíos emigró a Israel o a Occidente, pero sólo unos pocos permanecieron. Vale la pena señalar que después de la fundación de la República Popular China, los dos extranjeros más famosos que vivían en China y que simpatizaban con el Partido Comunista Chino, Shaboli e Israel Epstein, eran ambos de ascendencia judía. Sarah Emas, una inmigrante judía que creció en China, se convirtió en la primera judía en inmigrar a Israel desde China después de que los dos países establecieron relaciones diplomáticas.
Siglo XXI: Hoy en día, se han construido 15 sinagogas para el culto de judíos expatriados y judíos locales en varias ciudades chinas.
En 2005, la Embajada de Israel en China celebró una celebración de Hanukkah en la Gran Muralla.