¿Quién es la persona más longeva del mundo?
A partir de 2023, la persona más longeva del mundo es Li Qingyuan, un experto chino en salud y longevidad en Qigong. Nació en el año 18 del emperador Kangxi de la dinastía Qing y murió en el año 24 de. la República de China (1679-1935) a la edad de 256 años.
Li Qingyuan (también conocido como Li Qingyun), (1677-1933), según algunos medios como People's Daily y Phoenix.com: Li Qingyun es la persona más longeva. Li Qingyun nació en el año 16 del reinado de Kangxi en la dinastía Qing (1677 d. C.) y murió en el año 22 de la República de China (1933 d. C.) a la edad de 256 años. Fue un estudioso de la medicina tradicional china desde el período Kangxi hasta la República de China, y también fue la estrella de la longevidad más antigua del mundo.
Cuando tenía 100 años, recibió un premio especial del gobierno por sus destacados logros en la medicina tradicional china y fundó la Clínica de Medicina Tradicional China Qingyuntang. Cuando tenía 200 años, todavía iba con frecuencia a ella. Diversos lugares para impartir conferencias. Durante este período recibió visitas de muchos eruditos occidentales. Li Qingyuan se casó con 24 esposas en su vida y tuvo muchos descendientes.
El secreto de la longevidad
1. Dieta saludable: Mantener una dieta equilibrada es un factor importante en la longevidad. Consuma más frutas frescas, verduras, cereales integrales y proteínas saludables, y limite los alimentos con alto contenido de grasa, azúcar y sal. Beba mucha agua y evite beber y fumar en exceso.
2. Mantente activo: La actividad física moderada es esencial para la longevidad. Mantenga hábitos de ejercicio moderados. Puede elegir el método de ejercicio que más le convenga, como caminar, correr, nadar, hacer yoga, etc.
3. Interacción social: Mantener interacciones sociales positivas puede mejorar la salud mental y la felicidad. Mantener buenas relaciones con familiares y amigos, participar en actividades comunitarias y unirse a grupos de interés son factores importantes para promover la longevidad. Compartir alegrías y dificultades con los demás y construir un sistema de apoyo puede ayudar a reducir el estrés y mejorar la calidad de vida.