Composiciones innovadoras para alumnos de primaria y secundaria
Antes, los estudiantes tenían que vivir en la pobreza sólo una vez durante diez años. Mirando la universidad de mis sueños, siempre sacudo la cabeza con impotencia, con lágrimas en los ojos, y me alejo en silencio, convirtiéndome en un punto negro con un suspiro. Hay innumerables tomas en innumerables series de televisión para representar esta escena, pero siempre siento que esas tomas no pueden reflejar la escena real, que es simplemente mágica. Innumerables talentos destacados se van no por sus calificaciones, sino porque las altas tasas de matrícula se convertirán en una pesada carga para sus familias. Verlos partir siempre quedará profundamente grabado en tu corazón. Es una especie de impotencia y arrepentimiento que no se puede describir con palabras. El espectador también sentirá un dolor sordo en el corazón, como si fuera comida de hormigas. Desde que se reanudaron los exámenes de ingreso a la universidad, no sabemos cuántas figuras se han ido y cuántas personas se esconden en la ciudad.
Somos afortunados y aún más felices. Nacidos en una era pacífica, estamos en un largo camino hacia una sociedad acomodada. Cuando participamos en las actividades del Sueño Chino, ya no nos preocupamos por no poder ir a la escuela porque nuestras familias son pobres. Debido a que el sabio Comité Central del Partido y los líderes nacionales han implementado la política nacional de becas, los estudiantes tienen el corazón marchito después de una larga sequía y la sensación de ver lluvia y rocío por primera vez. Esta política significa que héroes de todo el mundo ingresarán al centro de nuestro partido. Al mismo tiempo, cultivan las excelentes cualidades de muchos estudiantes, aprenden a ser agradecidos y no escatiman esfuerzos para contribuir al país, lo que les hace valorar esta oportunidad de aprendizaje ganada con tanto esfuerzo, aprovechar todo el tiempo disponible, recargarse constantemente, matar virus, y actualizarse y mejorarse. Acompañados de becas nacionales, se sienten más seguros, como si se pusieran un paraguas, y de repente sienten que "el fuego salvaje nunca se apaga y la brisa primaveral sopla más alto".
La gratitud y la felicidad están más allá de las palabras. Acompañando la beca, creciendo bajo el sol y podando con el viento y la lluvia, eventualmente crecerá hasta convertirse en un árbol imponente y se convertirá en el pilar del país.