"Conociendo a Qingcheng" es solo una prosa que pasó por alto casualmente.
Conforme va pasando el tiempo, siempre hay una figura por la que estás dispuesto a bajar las cejas y convertirte en flor en el polvo.
Cuando miro hacia atrás en la vida, encuentro que el encuentro es el palpitar de las cejas y un corazón cálido. Esas cosas hermosas están destinadas a ser hermosas y silenciosas.
¿Es inevitable perderse? ¿Por qué todavía queda el calor residual del recuerdo en mi corazón y no quiero dejarlo ir y dejar que se enfríe? Sentado en los brazos del tiempo, todavía tengo ganas de llorar. Cuando tu corazón esté lleno de emociones, estará un poco húmedo; cuando tus emociones estén altas, te lastimará en todos los sentidos.
Una noche de viento y lluvia, un sueño se desvaneció. Esas palabras de amor que han estado escondidas en mi corazón durante mucho tiempo están siempre en esta corriente goteante, desordenadas en oraciones y capítulos rotos, las cuerdas no pueden formar líneas y la tinta no puede formar un libro. Después de la lluvia, mis pensamientos se volvieron más húmedos y oscuros. Quería alcanzarlos pero no pude salvarlos.
He estado deseando buscarte por la mañana cuando las flores están abiertas, con la ropa revoloteando, los ojos tímidos y la alegría. Sin embargo, cuando desperté del sueño, fue la infiltración de un viento y una lluvia tan fríos, y mi corazón se balanceaba aquí, a veces triste y a veces feliz.
Se dice que las personas a las que les gusta recordar envejecen. Quizás, a medida que va pasando el tiempo y los patios se van poblando, aquellas cosas que un día tuvimos y que vale la pena recordar se han ido con prisa...