Educación para niños de primer grado
La formación de hábitos es el resultado de una conducta acumulada. Cuando un niño tiene una sensación de éxito a partir de un determinado comportamiento, naturalmente repetirá el comportamiento y se convertirá en su hábito. Los hábitos determinan el carácter y el buen comportamiento de una persona. El cultivo de hábitos debe comenzar desde la infancia, desde la familia. Nada de lo que hacen nuestros padres puede escapar a los ojos de nuestros hijos. Debes predicar con el ejemplo y dar un buen ejemplo a tus hijos en todo momento. Los padres deben tener sus propias opiniones delante de sus hijos. Debemos ser firmes en todo lo que hacemos. Si los padres no pueden decidirse, sus hijos también se verán afectados.
La formación de buenos hábitos en los niños es un proceso de consolidación continuo y a largo plazo. Inicialmente, los padres necesitan orientación, supervisión y la necesaria moderación. Mientras los padres tomen la iniciativa, den el ejemplo y perseveren, poco a poco se irán formando buenos hábitos.