Uso clásico de la tarjeta OH
Cada miembro saca una tarjeta de patrón y una tarjeta de palabras, boca abajo. Primero mantenga estas dos tarjetas en privado y luego ábralas cuando necesite usarlas. Sólo así se podrá suscitar la espontaneidad del momento. Cada miembro se turna para decidir si lo utiliza (Regla 1). Abre la tarjeta para que todos puedan verla. "Explorar" primero, luego "responder".
La detección... consta de los siguientes pasos:
Describir la pintura. Piensa con claridad, no te bases en palabras, usa tu imaginación (recuerda la regla 5).
(b) Lee el texto y cuenta lo que significa para ti. Presta atención a la pronunciación de las palabras, que pueden transmitir alguna información sobre el hablante (recuerda la regla 5).
Nota: No existe una interpretación llamada "correcta" de estas tarjetas. La idea de malas interpretaciones y de inversión de paradigmas es una gran parte del juego de cartas OH, lo que hará que esa interpretación sea más personal.
(c) El sentimiento creado al centrarse en la combinación de estas dos cartas debe ser personal, subjetivo y poético.
(d) Utilice "yo" en lugar de "una persona" o "tú" para conectar la combinación de estas dos cartas con un determinado aspecto de su vida; evite palabras condicionales como "si", "; Tal vez”, “tal vez”, “sin embargo”; evite las generalidades o filosofar, no sea literal, haga que las tarjetas sean sugerentes y metafóricas, enfatizando cómo se siente en la situación que la tarjeta evoca, evite los “yo creo” y “debería”.
(e) No hables extensamente del pasado. Está bien mencionar brevemente el pasado y es sólo para aclarar la situación.
(f) Por ejemplo, cuando finalice una exploración, diga claramente: "Mi parte ya está hecha".
Reacción... al final de la exploración, el otro miembro puede decir una respuesta "breve", decir algún tipo de reacción, incluso si es sólo un reconocimiento, o señalar que te has metido en su situación, o reconocer que te has dejado llevar por una fantasía personal (no es necesario ¡explora esa fantasía!).
El principio rector es: reaccionar sólo a lo dicho, no a la tarjeta. Esa respuesta debe ser breve y no robarse la atención. Evita dar consejos o psicoanalizar... no te involucres en esa conversación. Los participantes suelen hacer preguntas que les ayudan a aclarar su comprensión de lo que acaban de decir, pero no emiten juicios. O responderán con un cambio de postura, un cambio de postura o un cambio de tono, o algunas veces responderán con los sentimientos que evoca esa exploración.
Presta especial atención a las reglas 3, 4 y 5: no reinterpretes esas cartas y no menciones cosas que se omitieron durante la exploración. Si bien puedes sentirte tentado a comentar lo que acabas de decir, no lo hagas ya que esto está más allá del alcance del juego OH Cards.
Por lo general, el uso clásico de la tarjeta OH es terminar después de tres rondas. En este punto, se pueden eliminar las tres combinaciones y examinar sus posibles interacciones. De hecho, una de las formas de jugar cartas Oh es utilizar una combinación de tres cartas. De esta manera, las interacciones y conexiones de estas cartas extraídas forman la base para la exploración. De esta forma divertida también puedes jugar solo.