"Soy dueño de una casa, ¿por qué todavía la tengo sin ti en la casa?" Hay una frase en un poema o en prosa que dice algo como esto.
Ocupé una ciudad,
No hay casa mía en esta ciudad,
Para qué he de ocuparla,
Yo vivir en una casa,
Sin ti en casa,
Para qué debería ocuparla,
Te llevo conmigo,
Pero me perdí,
¡Por qué debería ocuparlo!
Recuerda, es la voluntad de Dios tenerme en tu vida. En esta vida, en ese momento, nos cruzamos y nunca lo perdimos. Encontramos una conexión en los ojos de cada uno que puede tardar miles de años en repararse.
Recuerda, estaba yo en tu vida, estaba la alegría en tus ojos, estaba el sentimiento de los latidos de tu corazón, estaba la persistencia, estaba tu profunda expectativa y anhelo, estaba tu dulzura. El amor verdadero persistente ha experimentado tu ansiosa espera y la tristeza y el desamparo de tu amor.
Recuerda, me tienes en tu vida. Aunque no puedo acompañarte en los altibajos de la vida, eres mi preocupación que nunca podré dejar ir en esta vida. Si estás feliz, entonces yo estoy feliz; si estás triste, entonces debo estar deprimido.
Recuerda, me tienes en tu vida. No quiero que prometas nada y no quiero que tengas ninguna responsabilidad. Sólo quiero que te des cuenta de que hay una sonrisa brillante como la mía en el brillante mar de flores en primavera, una mirada afectuosa como la mía en el brillante cielo nocturno en verano, un anhelo ardiente como el mío en las ardientes hojas rojas de arce en otoño, y un anhelo ardiente como el mío en la nieve cristalina en invierno. Una bendición tan pura de mi parte.
Recuerda, me tienes en tu vida. Si tu corazón está roto, estoy llorando. Si sueñas conmigo, te extrañaré. Dejemos que dos corazones se toquen de vez en cuando a lo lejos, sólo de vez en cuando, como meteoros en el cielo sin límites.
Recuerda, me tienes en tu vida. No me recuerdes profundamente, recuerda todo lo que alguna vez tuvimos. Sólo espero que el tintineo ocasional de las campanas de viento pueda sonar para alguien que una vez te amó tan profundamente y parece haber sido olvidado en mi corazón. Solo sonrío y pienso en su suave sonrisa hacia ti.
Recuerda, me tienes en tu vida. Si me amas, tengo suerte. ¡Si eres feliz, ese es mi más sincero deseo!
Recuerda, ya estoy en tu vida, recuerda, ya estoy poco a poco en tu mundo.