¿Cómo educar a una niña de 5 años traviesa y desobediente?
2. Si los padres siempre adoptan una actitud dura hacia la terquedad y las demandas irrazonables de sus hijos, puede causar frustración en los niños, hacer que les resulte más difícil aceptar el rechazo de sus padres e intensificar el rechazo de los niños. resistencia. En primer lugar, los padres deben mantener una actitud tranquila y controlar sus emociones. Si el niño llora y se revuelca, lo mejor es tratarlo con calma; si el niño está fuera de control, los padres pueden darle un abrazo cariñoso.
3. Los padres primero deben dejar claro que el “no” de sus hijos es sólo para expresar sus propias ideas, no para contradecir deliberadamente a sus padres. Si bien los padres imponen exigencias a sus hijos, también les permiten expresar sus pensamientos sin obstáculos, les dan el derecho a elegir y respetan sus elecciones como adultos. Durante este período, la comunicación entre padres e hijos es muy importante. Los padres no sólo deben dar a sus hijos plena voz, sino también tomar medidas apropiadas para permitir que sus hijos reciban una mejor educación de sus padres.
4. Por ello, los padres deben tener una actitud correcta y afrontar a sus hijos con una mente tolerante y abierta. No actúes como un padre y dé respuestas "serias" y educación a lo que dicen sus hijos. Conversaciones "pesadas" como ésta reducirán el deseo de los niños de comunicarse con sus padres.
5. Si el niño es travieso y desobediente, y los padres le dan consejos repetidos, es apropiado dejar que el niño pruebe las consecuencias de la obstinación. Los padres pueden dejar que sus hijos "choquen contra la pared" en la vida y experimenten más fracasos, para que sus hijos puedan comprender y aceptar gradualmente las consecuencias de sus acciones, y su capacidad para afrontar los reveses será más fuerte.
6. A los dos años, los niños comienzan a tener la necesidad de autodesarrollarse, tener una ideología independiente, tratar de comprender el entorno que los rodea, establecer sus propios gustos y aversiones y expresar sus necesidades personales. . Además, también le permiten hacer algo por sí mismo para mostrar sus habilidades a los adultos, porque siente que sus habilidades ya son fuertes. Durante este período, si los niños son restringidos e interferidos repetidamente, pueden volverse obedientes y convertirse en nonono. Por otro lado, si los padres saben claramente que lo que sus hijos están haciendo está mal pero se limitan a complacerlos, sin duda esto es mimar a sus hijos.