La Red de Conocimientos Pedagógicos - Conocimientos universitarios - 3.29 Discurso bajo la Bandera Nacional

3.29 Discurso bajo la Bandera Nacional

Discurso bajo la Bandera Nacional

Maestros y alumnos, ¡buenos días! El tema de mi discurso de hoy es valorar la vida y prestar atención a la seguridad.

¡La vida humana es preciosa! La vida humana es sólo una vez, por eso debemos valorar nuestra preciosa vida. Para apreciar la vida, primero debemos prestar atención a la seguridad. La seguridad está relacionada con todos los aspectos, como la seguridad del campus, la seguridad del tráfico, la seguridad contra incendios, etc.

Hoy quiero hablar sobre la seguridad en el campus. Dentro y fuera del campus, algunos accidentes peligrosos que escuchamos y vemos a menudo ocurren con frecuencia, la mayoría de los cuales ocurren en el camino hacia y desde la escuela. En nuestro campus, algunos estudiantes son muy impulsivos, persiguen, caen y chocan. Los desastres no provocados llegan a nuestra puerta y las sangrientas lecciones nos hacen saber que la seguridad del campus está estrechamente relacionada con nuestros maestros y estudiantes, y está relacionada con si nuestros estudiantes pueden crecer de manera saludable y completar sus estudios. Está relacionado con si los profesores pueden enseñar y educar a las personas en un entorno tranquilo y seguro. La seguridad del campus es un requisito previo para nuestro aprendizaje en todas las materias, y la seguridad es una de las principales prioridades de la escuela. Todos deben prestar atención a la seguridad del campus, persistir e implementarla. Especialmente nuestros estudiantes de primaria deben prestar más atención a la seguridad, especialmente a los siguientes puntos:

Primero, debemos tener un alto grado de conciencia de seguridad y comprender completamente la importancia de la seguridad.

En segundo lugar, preste atención a la seguridad psicológica.

En tercer lugar, prestar atención a la seguridad deportiva en todo tipo de deportes.

En cuarto lugar, debemos prestar atención a la higiene y seguridad alimentaria. No coma alimentos antihigiénicos en los puestos callejeros y vaya al hospital lo antes posible cuando esté enfermo.

En quinto lugar, preste atención a la seguridad de las clases informativas y experimentales en el aula.

No perseguir ni jugar juegos peligrosos durante el recreo. Manténgase a la derecha al subir y bajar escaleras. No se deslice por el pasamanos de la escalera. Vaya a la esquina y reduzca la velocidad para evitar colisiones.

En sexto lugar, debemos prestar atención a la seguridad en el camino a la escuela y después de la escuela.

Respetar las normas de circulación y prestar atención a la seguridad vial. Está prohibido ir en bicicleta a la escuela. Al cruzar la calle se debe utilizar el paso de cebra. Al cruzar la calle, mire a izquierda y derecha hasta que no pase ningún vehículo. Preste atención a los semáforos, pare en el semáforo en rojo y avance en el semáforo en verde.

La seguridad es como los ojos, ¡siempre con nosotros! La seguridad es como los oídos, ¡siempre nos lo recuerdan! Con una sensación de seguridad, podemos tener una mente sana y un cuerpo fuerte; con una sensación de seguridad, podemos tener la firme voluntad de ascender en la escalera de la vida, con seguridad, podemos ser tan prósperos y felices como los melocotones y las ciruelas; en la primavera. Con seguridad, podemos ser enérgicos y diligentes en el aprendizaje de conocimientos científicos y culturales.

La seguridad es como un sol radiante que ilumina nuestras vidas. La seguridad es como un largo vínculo que conecta nuestra vida y nuestra muerte.

En definitiva, en nuestra sociedad “todavía hay mucha gente buena”, esto es un hecho. Sin embargo, la situación social es compleja, todavía existen trampas y de vez en cuando se producen casos de delincuentes que toman medidas desesperadas. Sólo comprendiendo el uso de la ley, junto con precaución, calma, diligencia e inteligencia, podremos garantizar la seguridad y mejorar gradualmente nuestra capacidad de vivir de forma independiente. Además, cada uno de nosotros vive en sociedad y necesita estar atado y restringido por múltiples fuerzas, legales, morales y emocionales. Un joven civilizado en la sociedad moderna debe tener una conciencia jurídica consciente y saludable en cualquier momento, en cualquier lugar y en cualquier asunto.

Estudiantes, la juventud es hermosa, pero nunca volverá; la vida es preciosa, pero no se puede dañar fácilmente. Sólo cuando la patria y el pueblo lo necesiten podremos levantarnos sin dudarlo. En un entorno normal y pacífico, siempre que fortalezcamos el concepto de ley y disciplina, fortalezcamos la conciencia de seguridad y dominemos las medidas de seguridad, podremos deambular libremente en el vasto espacio de la civilización espiritual y la civilización material, permitiendo a nuestra juventud y vida para brillar.

Por nuestra salud, por la felicidad de nuestras familias, por la prosperidad de nuestro país, para que el mundo sea menos triste y más feliz, recordemos siempre:

Aprecia la vida , presta atención a la seguridad, ¡empieza conmigo!

Mi discurso ha terminado, ¡gracias a todos!