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Un ensayo argumentativo de 600 palabras sobre el coraje contra la corriente

Siempre me meto en multitudes ruidosas de forma intencionada o no, pero nunca me gusta seguir a la multitud involuntariamente. Entonces aprendí a nadar contra la corriente, luchando hacia adelante con todas mis fuerzas, sin miedo a las multitudes, solo para avanzar libremente.

Siempre hay un fragmento en la impresión. Esto es una fiesta. La gente se agolpaba en las calles hombro con hombro. Las personas que están en él no pueden evitar conservarlo. Solo podían moverse paso a paso en dirección a la multitud y ni siquiera podían verse sus propios pies. Frente a ellos, además de las extrañas e indiferentes nucas, estaba el cielo gris que de vez en cuando aparecía entre las cabezas. Las calles se vuelven aburridas por el ruido y siempre me siento asfixiado en ellas. Si puedes tomar las manos de tus padres, debes sostenerlas con fuerza; de lo contrario, la multitud los separará antes de que puedas sostenerlas con fuerza. Incluso si están cerca, se sentirá como el fin del mundo.

Cuando la gente está entre la multitud, siempre habrá un sentimiento de impaciencia en la vida, por eso no me gustan las multitudes, así que incluso si me meto entre la multitud, debo insistir en ir contra la corriente.

Cuando caminaba contra la corriente de gente, lo que enfrentaba no era la fría nuca, sino mi cara. Aunque soy un extraño, creo que entre las innumerables caras de Lu Yu, siempre habrá una cara sonriente. Y una sonrisa es suficiente para disipar la neblina en mi corazón, quitar el polvo de mi corazón, traer la luz del sol, dejar que las semillas dormidas broten y se conviertan en hermosas flores. Yendo contra la corriente, aunque te sientas solo, siempre estarás acompañado de esa extraña cara sonriente.

A veces mientras camino, porque necesito mis propias fuerzas para abrirme camino, sin saberlo aprendo a avanzar con valentía. No me importa si habrá altibajos por delante o si habrá acantilados escarpados, porque he aprendido a ser valiente y avanzaré con valentía hasta el final. Todos los que conozco han estado en el camino que estoy a punto de tomar. Nos leemos unos a otros, leyendo confianza y coraje en las trayectorias de los demás. No importa lo difícil que sea ir contracorriente, aún podremos sobrevivir en las buenas y en las malas.